sábado, 13 de septiembre de 2008

Presidentes que han hecho historia

JULIÁN PALACIOS ( 1900 - 1902 )



Primer presidente del club, cuando la sociedad era un esbozo de sí misma. Palacios fue el promotor y pionero de lo que más tarde sería este gran club. El fue quien unió al Madrid con el Sky, y presidió la junta hasta la fundación oficial del club.






JUAN PADRÓS (1902 - 1904 ).




Segundo presidente del Real Madrid. Será fundador del Madrid, dándole un carácter oficial al equipo creado por Palacios. Dejó sentadas las bases, para la continuación de la construcción del club.






CARLOS PADRÓS (1904 - 1907 )
Hermano de Juan Padrós, y una de las figuras más importantes del club. Fue un auténtico visionario del fútbol, un adelantado a su época. De él, parte la idea del campeonato de España, concede las primeras medallas y trofeos deportivos, establece el primer domicilio social del club, señala las cuotas de los socios y los campos de juego. 3 Copas de España.



ADOLFO MELÉNDEZ ( 1908 - 1916) (1939 - 1941).


Este gallego, general del ejército, presidió el club en dos etapas diferentes. En la primera, culminó los proyectos iniciados por Padrós. Terminada la guerra, y cuando el club, no era más que un grato recuerdo del pasado, volvió a tomar las riendas del equipo. Construyó los campos de Narváez y O´Donnell.



PEDRO PARAGES (1917 - 1926)


Socio número 1 del club. Como presidente, le tocó vivir la penosa transición al profesionalismo. Fue sin duda una de los grandes mecenas de la entidad.




LUIS DE URQUIJO (1926 - 1929)

Dió grandes muestras de audacia y talento, para encauzar el profesionalismo en el fútbol. Gracias a su generosidad y esfuerzo el Madrid construye el campo de Chamartín, para el que aportó un millón y medio de pesetas en el año 1932.



LUIS USERA B. (1929 -1933)

Supo rodearse de un formidable equipo de colaboradores, a quienes dejó trabajar con libertad de movimientos. Con él lllegarón al club, los Zamora, Quincoces, Regueiro, etc. Durante su mandato el número de socios se multiplicó. 2 Ligas.



ANTONIO SANTOS (1933 - 1934)

Su mandato fue el más corto y además el de menos complicaciones. Con un gran equipo formado, los triunfos deportivos se sucedían unos tras otros y los socios y simpatizantes aumentaban sin cesar. 1 Liga y 1 Copa.



RAFAEL SÁNCHEZ ( 1935 - 1939)

Abogado, periodista, diputado, etc. Sus múltiples ocupaciones, no le impidieron en absoluto, regir con acierto los destinos del club. Rafael sánchez, puso toda su influencia al servicio del club. 1 Copa.



SANTIAGO BERNABÉU (1943 - 1978)

Pasará a la historia del fútbol, como el presidente perfecto. La trayectoria profesional de Bernabeu es tan importante, que hasta los detractores del club, ensalzan su fugura. Empezó como jugador, luego directivo y finalmente llegó a presidente, cargo que ocupó hasta su fallecimiento en 1978. Durante su etapa, tienen lugar los acontecimientos más importantes en la historia del club. Se construyó en 1947, el estadio Santiago Bernabeu, las instalaciones de la ciudad deportiva, así como las instalaciones del equipo de Baloncesto, etc. Partcipó activamente en las comisiones de la UEFA, y fue uno de los precursores de la creación de la Copa de Europa. Durante su mandato tuvo todo un gran elenco, de entrenadores y jugadores, que deportivamente coincidió con la época de oro deportiva del club. 16 Ligas, 6 Copas, 2 Copas Latinas, 6 Copas de Europa, 1 Copa Intercontinental. En Baloncesto: 19 Ligas, 18 Copas, 6 Copas de Europa, 3 Copas intercontinentales.



LUIS DE CARLOS (1978 - 1985)
Le tocaron vivir los años más duros del madridismo, tras la desparición de Bernabeu. En el club se produce un vacio que es imposible llenar. Sin embargo, De Carlos supo afrontar esta etapa con seriedad y entereza. Conocido por ser un caballero, honrado y trabajador, afrontó su misión con la labor de continuar la obra de Bernabeu. 2 Ligas, 2 Copas, 1 Copa UEFA. En Baloncesto: 5 Ligas, 1 Copa, 1 Copa de Europa, 1 Recopa, 1 Campeonanto mundial de clubs.


RAMON MENDOZA (1985 - 1995)

Es difícil juzgar a un presidente como Mendoza, perseguido por la polémica y con numeroso detractores. No obstante es innegable, que con él, el club vive su segunda etapa más gloriosa en lo deportivo, sólo ensuciada por la falta de la Copa de Europa. Mendoza tiene en su haber el impulso de la economía del club en sus primeros años, aunque más tarde, y debido a la renovación del estadio, dejó el club con numerosas deudas. En un futuro, la gestión de Mendoza se recordará, como la más moderna y la más innovadora. Al llegar al Madrid, se encontró la sociedad dormida en lo deportivo y en lo económico, y gracias a una acertada política de fichajes y de inversiones logro mantener al club entre lo más alto del panorama nacional e internacional. 6 Ligas, 2 Copas, 4 Supercopas, 1 Copa UEFA y 1 Copa de la Liga. En Baloncesto : 3 Ligas, 3 Copas, 1 Copa de Europa, 2 Recopas y 2 Copas Korac.


LORENZO SANZ MANCEBO (1995-2000)



Lorenzo Sanz, accede a la presidencia del club, tras la debacle económica de la gestión de Ramón Mendoza, gracias al apoyo de la junta directiva. Vicepresidente durante el mandato de Mendoza, Sanz es un hombre de negocios que sabe como manejar el club. Devolvió la esperanza al aficionado, intentando sanear la economía del club, con contratos televisivos, recuperación de los derechos de merchandinsing, y apoyo de entidades financieras. En lo deportivo, la construcción de un gran equipo que aportó nuevos títulos y tardes de gloria al madridismo. Cabe destacar la conquista de 2 Copas de Europa y 1 Intercontinental en tres años. Como apunte negativo, cabe resaltar la poca capacidad para reducir la deuda. 1 Liga y 1 Supercopa. 2 Copas de Europa , 1 Copa Intercontinental. En Baloncesto: 1 Recopa de Europa, 1 Liga ACB.



FLORENTINO PÉREZ (2000-2006)

Tras las últimas elecciones (Julio 2000), se proclama vencedor y accede a la presidencia del club. Tiene ante sí el gran reto de sanear la economía del club, y potenciar aun más el equipo en el aspecto deportivo. El marketing de los productos madridistas, las nuevas tecnologías y dotar al club de nuevas y diferentes tecnologías son otras de sus consignas electorales. El fichaje de Luis Figo al FC Barcelona, fue su gran baza electoral. 2 Liga. 1 Supercopa de España. 1 Champions league. 1 Supercopa de Europa. 1 Intercontinental.En Baloncesto: 1 Liga ACBTras unas temporadas difíciles y ante la crisis institucional creada, decide presentar voluntariamente su dimisión.


FERNANDO MARTÍN ALVÁREZ (2006)

Miembro de la Junta Directiva desde el año 2000, Fernando Martín coge las riendas del Real Madrid en febrero de 2006 tras la dimisión de Florentino Pérez. La afición deposita en él su esperanza, tras los últimos años sin éxitos deportivos.Al convocar las elecciones, pierde la presidencia en beneficio de Ramón Calderón.



LUIS GÓMEZ MONTEJANO-ARROYO (2006) (3 MESES)


Está apenas tres meses en el club, como presidente interino, hasta que se convocan las eleeciones a la presidencia, que posteriormente y tras mucha polémica con el recuento electoral, ganaría Ramón Calderón.




RAMÓN CALDERÓN (2006-)

Tras la dimisión de Florentino Pérez, y el paso efímero de Fernando Martín, como presidente interino, en Julio de 2006, en unas polémicas elecciones, sale elegido Ramón Calderón, como nuevo presidente.Ante si el gran reto, de volver a ser el gran equipo de estos últimos años y borrar estos tres años anteriores sin títulos.Por fín en este año le llegan sus primeros títulos de la mano del baloncesto, con la Copa Uleb y del fútbol, con su primera liga 2006-07.2 Ligas.En Baloncesto: 1 Liga ACB, 1 Copa ULEB.

viernes, 12 de septiembre de 2008

Robinho, en el Madrid no queremos peseteros

Llevo muchos años apoyando con interés al Real Madrid y hay una cosa, quizá una sola, que a estas alturas tengo por indiscutible: en ese club sólo caben jugadores que quieran ganar cada uno de los cincuenta o sesenta partidos que jueguen al año. Sean buenos o malos, finos o brutos, altos o bajos, gordos o flacos, españoles o extranjeros, porteros o goleadores, sólo sirven para el Madrid los que quieren ganar todos y cada uno de los cincuenta o sesenta partidos que jueguen al año, lo consigan o no. En Liga, Copa, Champions, amistosos, TrofeoBernabéu o Supercopa. Sólo valen esos.

Esa debe ser la ley de bronce al fichar y al dar bajas. Eso explica que fuera un acierto desprenderse de Reyes, aunque hubiera estado cumbre el día que se decidió una Liga, lo mismo que explica que Michel Salgado o Chendo hayan durado tantos años en el club. Eso explica que el madridismo desee un año y otro, sobre todas las cosas, la resurrección de Raúl y que mire con desconfianza a Guti a pesar de su indiscutible talento. Eso hace que jugadores tan dispares como Di Stéfano, Pirri, Benito, Stielike, Juanito, Santillana, Camacho,Butragueño o Redondo sean indesplazables en el santoral madridista.

Lo digo por Robinho, jugador en quien tuve muchas esperanzas.Pero a los tres años de verle no creo que quisiera ganar cada partido que jugó. Algo que sí he visto en Van Nistelrooy, Robben, Pepe, Diarra, Higuaín y bastantes más de los involucrados en la soberbia remontada de anteanoche, ese rapto de fanatismo ganador que me recordó al del Reyno de Navarra no hace tantos meses, que valió una Liga. Si se va Robinho (que se irá), el que o los que vengan debe o deben ser jugadores de gran categoría. Pero además de eso, deben ser jugadores decididos a ganar cada partido que jueguen. Si no, no valdrán.

Entrevista a Raul Gonzalez Blanco

Rápido, intuitivo, valiente, goleador... Raúl reúne todos los calificativos que desea un futbolista. A los 19 años consiguió más que la mayoría de los jugadores cuando pasan balance al final de sus carreras.

Es un ejemplo para los aspirantes al triunfo. Ha sabido abrirse paso en un vestuario lleno de estrellas. Raúl dio vida a un equipo herido de muerte y consiguió ser bien recibido en territorio enemigo.

"ME SIENTO MUY ESPAÑOL"


Ya han pasado diez años de profesional.


Diez años, 500 partidos... Lo ves y no te lo crees. Son sensaciones bonitas y extrañas. Nunca me pude imaginar que iba vivir esta situación. Estoy contento y satisfecho, con ganas de dar guerra y disfrutar con el equipo que cambió mi vida. Tengo amigos y ganas de seguir.



¿Y ahora cuáles son sus próximas metas?


Las metas se marcan día a día. Hace diez años no me podía imaginar que llegaría hasta aquí y hay que vivir el presente. Mi próxima meta es ganar el partido contra el Getafe, poder jugar y meter goles intentando que la gente disfrute y se vaya contenta a su casa. He conseguido muchos títulos y he perdido otros con temporadas decepcionantes. Pero esa es la grandeza del fútbol y de vivirlo en el Madrid. Aquí todo tiene mayor trascendencia. Quiero seguir disfrutando de mi profesión. Aún me queda mucho por dar.



¿Cuál ha sido el mejor y el peor momento de su carrera?


El mejor fue el primer partido. Fueron unas sensaciones irrepetibles, muy bonitas. Un día antes ya sabía que iba a jugar, viajé con el equipo, recuerdo las sensaciones de la noche anterior y de la mañana del partido, lo que ocurrió en el campo aunque no ganamos. Recuerdo la alegría de mis padres, de mi familia, de mis amigos, de la colonia Marconi. Fue allí cuando mi vida cambió. Lo peor fue en 1997 cuando sufrí una lesión de pubis. Tuve molestias todo el año y veía el sufrimiento de mis padres y amigos. Se dijeron muchas cosas que no eran verdad. Fue un momento de sufrimiento físico y psíquico por los comentarios extradeportivos que perjudicaron a mi entorno y a mí.



¿Qué personas destacaría en estos diez años?



Es muy difícil elegir sólo a una persona. Valdano ha sido para mí una de las más importantes. Le dio la confianza a un chico de 17 años que nadie conocía y que esperaba triunfar. Me dio su confianza, su amistad, sus consejos y me hizo creerme que podía jugar al nivel más alto. He mantenido su amistad y tengo mucho que agradecerle. Luego hay más: mis padres, mi familia, mi mujer y ahora mis dos hijos. También Ginés Carvajal. Formamos un dúo y seremos inseparables hasta la retirada.

¿Con qué jugadores se ha divertido más?





Con muchos. Todos mis compañeros tienen una gran calidad, así que disfruto con ellos. Con quien más feeling he tenido en el campo ha sido con Redondo y Fernando Hierro. No hacía falta decirnos nada, con una mirada nos bastaba para entendernos, para dar la vuelta a una situación complicada. No quiero dejar de nombrar a Laudrup, Zamorano, Mijatovic, Suker, Seedorf o los actuales. Todos aportaron su granito de arena y me ayudaron ser mejor cada día. He disfrutado viendo a Laudrup en el vestuario, cómo tocaba el balón y no se le caía. Intento observar, pero no soy de hacer bicicletas o la ruleta como Zidane. Disfruto viéndoles, pero tengo mi propio estilo y me ha ido bien.


¿Y de qué título se siente más orgulloso?


De todos. Ha habido partidos como el la Intercontinental y conseguir ese gol fue una recompensa al trabajo y al sufrimiento. Guardo con cariño lo del aguanís.


¿Ha sido su mejor gol?


Ha sido uno de los goles más importantes y bonitos de mi carrera y, además, en una final. Es el gol soñado porque faltaban ocho minutos y suponía un broche de oro importante tras un año de sufrimiento.


¿Qué recuerdos guarda de aquel partido en La Romareda?


Me sentí contento y satisfecho porque había participado mucho en el juego. Pensé que podía jugar más partidos. Mi cabeza pensaba en estar en el siguiente partido, sabía que lo tenía difícil. Tampoco sabía si iba a volver al Segunda B, al Segunda A o me iba a quedar en el primer equipo. Era una situación rara, pero en mi cabeza siempre creí que tendría otra oportunidad. Cuando Valdano me comentó que jugaría contra el Atlético, me dije: Esto no se me puede escapar. Quería marcar un gol y logré dos. Uno de ellos fue a pase de Laudrup. Hasta me hicieron un penalti. Me fui a casa como paseando por las nubes. Fue sensacional.


¿Le gustaría acabar su carrera aquí o probaría otras Ligas?


Quiero vivir el presente. En diez años no he tenido ninguna lesión grave. Cuando te gusta jugar, lo haces con gusto. Tengo contrato hasta el 2010 y espero estar seis años más a buen nivel. Cuando se acerquen esas fechas tendré que valorar. Sólo pienso en el Real Madrid. Cuando un compañero se va del equipo siempre hace el mismo comentario y te dice que, aunque le vayan bien las cosas, echa de menos jugar en el Madrid. Quizá en otro club ganas en tranquilidad, pero cuando estás fuerte mentalmente, tienes la capacidad para seguir. Pero eso no quiere decir que mi decisión pueda variar en algún momento


Y lo único que le falta es la Copa del Rey y un gran título con la Selección.


La Copa del Rey es una espinita que tengo clavada. Ojalá la podamos conseguir algún día. Es una pena que hayamos estado dos años tan cerca. Perderla en la final te deja especialmente dolido. Espero que no me retire sin ella. En cuanto a la Selección, ganar algo con la camiseta de España sería una de las mayores ilusiones. Me siento muy español. He disfrutado viendo jugar a la Selección cuando era pequeño, tuve su uniforme y ojalá que pueda vivir un triunfo como jugador, pero si un día me retirase iría a apoyarla y a celebrar con toda España un título con la selección.




Dicen que es un jugador ocho, ¿en que se considera un diez?


En nada. Es muy difícil poder decir que alguien tiene algo de diez. Soy un buen futbolista, he ido progresando y mejorando muchas cosas. He tenido buenos entrenadores y la capacidad para aprender. Además, he jugado en distintas posiciones y eso me ha hecho madurar futbolísticamente. Tengo ganas de ganar, mucha ambición y nunca me conformo.


¿Sigue pensando que lo mejor está por llegar?

Sigo pensando que lo mejor está por llegar. He tenido algunos problemas físicos y, si hubiera menos partidos en cada temporada, daría más rendimiento.


¿Qué le parece que, en el fondo, siempre se le discuta?


Eso forma parte del fútbol. No vivo del pasado, ni de los títulos que tengo. Si pierdo el domingo me iré enfadado a casa. Hay altibajos físicos. A veces la pelota no entra y, otras veces, no sabes cómo lo haces. Las críticas son buenas para mejorar. También hay una facilidad para el halago. Siempre he vivido una situación privilegiada. He tenido la confianza de los entrenadores y he jugado. Pero llegará el momento en el que tenga que vivir otra situación y ahí también intentaré superarla. Cada día es un reto. También viene gente joven por detrás que puede batir esos números. Pero vivo el día a día. Estos días son especiales, pero a partir del domingo, cuando salte al campo, todo eso se olvida.


¿No darle el Balón de Oro es injusto?

No. Creo que es muy complicado ganarlo. Me siento orgulloso de las veces que he estado en la pelea por conseguirlo. Es un premio muy especial, pero no es mi meta. Tengo otras mejores a corto plazo. Y si no lo consigo yo, espero que lo logre otro español.


¿Le gustaría ser entrenador cuando deje esto?


De momento no. Puede ser una de las posibilidades. Me gusta el fútbol y cuando me retire seguiré ligado a él, pero no sé en qué función.


¿Cree que saldrá otro chaval como usted?


Es difícil, pero con el tiempo va a volver a salir gente joven. En el Madrid juega gente joven, pero es difícil encontrar un hueco. Lo mío nadie lo podía imaginar. Estaba jugando en juveniles y, en tres meses, pasé al primer equipo.


¿Cómo logró cambiar el chip al pasar a ser un chico conocido?

Es complicado y durante estos años he vivido varios procesos. Con 17 años no tienes ni tiempo para pensar. Mis compañeros me han recordado aquella foto en la que me subí a un elefante y se reían. Son situaciones que, quizá, hoy no repetiría, pero en ese momento no lo piensas y te hace gracia. Luego uno va madurando y la vida te va marcando el camino.

¿Es un viejo prematuro?

No. Me siento joven. Me sentiré así cuando tenga 32 años y me vaya quedando solo y vea la realidad.

¿Pensó que usted iba a sentar al Buitre en el banquillo?


Fue producto de las circunstancias. Emilio jugaba poco, creo recordar que debuté porque iba a jugar Zamorano y se lesionó. Ahora bien, llegar al vestuario y ver a Emilio en el banquillo era una situación extraña, pero fue más complicado para el entrenador. A las tres semanas de debutar Emilio me invitó a su casa y me dio todo el apoyo y buenos consejos.


¿Eso que hizo Butragueño, lo hace usted con los canteranos?


La gente veterana tiene que ayudar a la gente joven. Cada uno tiene su forma de ser, su carácter y tienen que abrirse su propio camino. Cada uno se tiene que dar cuenta de las cosas. Les dejo libertad y les digo que si tienen problemas y dudas se pueden acercar a mí. Yo sólo aconsejo, nunca obligaré. Cada uno tiene libertad para elegir.

¿Le gustaría recibir un homenaje por estos diez años, como hacen en Inglaterra?


Allí existe otra cultura. Para mí lo que es un homenaje es poder jugar en el Madrid cada día. No puedo pedir nada porque me siento contento con todo lo que me ha dado. Es como estar en mi casa y, si algún día deciden darme algo más, me sentiré muy halagado.

¿Ve en algún jugador a su sucesor?


Hay muchos jóvenes con calidad, pero no se le puede meter presión innecesaria a un futbolista con comparaciones.

¿Es ya su familia del Madrid?

Mis padres sí, mi hermano no. Sigue siendo atlético. Se alegra de mis goles, pero que no sean al Atlético.

El Barcelona su eterno rival
















Hay una rivalidad furiosa entre estos dos equipos Barcelona y Real Madrid. Algunos dicen que es la rivalidad más grande en todo el mundo de deportes. Definitivamente, es más feroz e intenso que cualquier rivalidad en los deportes americanos. Tiene sentido simplemente desde una perspectiva de los deportes que habría una rivalidad entre Real Madrid y Barcelona. Los dos equipos son unos de los mas viejos y anualmente unos de los mejores equipos en toda España. Pero esta tensión entre los dos es mas que una rivalidad simple entre equipos de fútbol, viene de la política. La rivalidad tiene sus raíces en la historia de España y el conflicto de la identidad regional en Cataluña. Históricamente, el equipo de Barcelona ha sido el vehículo principal por el cual los Catalanes han podido expresar su oposición al gobierno nacional, especialmente durante los 46 años de la dictadura de Franco. Mientras el club de Barcelona ha simbolizado la identidad y orgullo regional para los catalanes, por los últimos ochenta años, Real Madrid ha simbolizado el gobierno nacional y el concepto de una España unida.







Se ha llamado el partido entre Real Madrid y Barcelona el clásico. Los dos equipos juegan por lo menos dos veces al año, y durante los partidos todo el país en efecto completamente cesa de trabajar. Para un país que está obsesionado con los deportes y la politíca, el derbí ofrece un evento que siempre captura la atención de toda la nación.


Zinedine Zidane, la prueba de que el futbol puede llegar a ser arte

Hubo un tiempo en el que los madridistas, se preparaban cada tarde de futbol como si algo maravilloso les fuera a suceder. Con el bocata de las grandes ocasiones, bufanda en mano y la camiseta blanca de cada domingo, los aficionados se dirigían al Santiago Bernabeu. Sus caras reflejaban algo que en temporadas pasadas no se apreciaba, una mirada confiada, tranquila, con pasión. En aquellos tiempos jugaba Zidane.

En el Bernabeu no quedaba una butaca libre, nadie se quería perder los partidos del Madrid desde que Zinedine Zidane llegara al equipo procedente de la Juventus de Turín. Todas las miradas estaban pendientes del francés, y no es para menos, mimaba el balón como una madre a su hijo, con la sutileza con la que un bailarín toma a su pareja artística, con la elegancia de un gran caballero. En aquellos tiempos jugaba Zidane.

El estadio saltaba, la gente disfrutaba y los amantes del futbol soñábamos. Soñábamos noches gloriosas, triunfales, mágicas. Porque Zizou en el campo demostraba que el futbol visto desde sus botas es mágico, la prueba más fehaciente de que el futbol puede llegar a ser arte. Alimentaba las retinas, emocionaba al corazón, inspiraba al soñador. En aquellos tiempos jugaba Zidane.

Pero no todos los días son fiesta. Llegó el día que hubiéramos quitado del calendario, la noche que ojala nunca hubiera acabado, la retirada del mejor jugador del mundo: Zinedine Zidane jugaba su último partido en el coliseum blanco. Entre sonrisas por volverle a ver y lagrimas porque ya era su última gesta, el estadio se llenó para despedir al jugado que enamoro al mundo. Tras el pitido final el francés acudió al centro del campo para agradecer a los aficionados el cariño recibido. Lloró, pero más nosotros, el futbol, y como no, el balón.
Tras dos años sin el mariscal solo me queda decir que algún día podremos contar a nuestros hijos que vimos jugar al más grande. En aquellos tiempos jugaba Zidane. Gracias maestro


Entrevista Emilio Butragueño

"MI DEBUT FUE COMO UN CUENTO DE WALT DISNEY"


DI STÉFANO “Me dijo en Cádiz: ‘Nene, calienta que vas a salir’. Me temblaban las piernas"

Fíjese, han pasado 20 años desde que debutó con el Madrid en el famoso partido de Cádiz...

Sí, 20 años y yo tengo 40. ¡La mitad de mi vida! Le voy a ser sincero. Ese 5 de febrero de 1984 siempre lo tengo presente. Me acuerdo de todo. Estábamos en el Hotel Atlántico de Cádiz. Hasta allí se desplazaron mi padre y mi cuñado. Después de comer jugué con mi padre al billar y tras la par tida me fui a descansar a la habitación, que compartía con Pitu (Pardeza). Llegamos al Carranza tres horas después y supe que debutaría. Algo me dijo que sería mi primer partido con el Madrid.


¿No le dijo nada Di Stéfano?


No hacía falta. Bastó que en el descanso, cuando ya perdíamos por 2-0 como el otro día ante el Valladolid, Alfredo me dijese: “Nene, calienta”. Bajé por las escaleras rumbo al campo y me temblaban las piernas. Lo peor fue para mi padre.


¿Por qué?


Porque el hombre estaba en la grada, comido por los nervios y rodeado por los aficionados del Cádiz. Salgo y meto el 2-1. Grita feliz. Lógico. Le dicen, ¿pero usted de qué va? Mi padre, respetuoso, les aclara. “Perdónenme, es que Butragueño es mi hijo”. La afición gaditana demostró ser señorial porque desde ese momento se volcaron con mi padre y, cuando marqué el 2-3 de la victoria, casi le sacan a hombros del Carranza. Fue increíble.


Hábleme de su histórico debut.


Tremendo. Con 2-0 abajo nos lanzamos al ataque de forma descarada. A mi lado estaban Juanito, Santillana, Gallego... Unos monstruos. Me llegó un balón suelto en el minuto 60 y marqué de tiro cruzado, batiendo a Cedrún. Era el 2-1. Porfiamos y cerca del final Gallego empató de cabeza. Pero insistimos y en un barullo en el último minuto aproveché un rechace de Andoni para marcar el 2-3. Me quedé como en una nube. No valoré lo que pasaba.


Vamos, que estaba flotando.


Totalmente. Los compañeros en el vestuario me apoyaron a tope y recuerdo que a Don Alfredo le pedí permiso para que me pudiese guardar la camiseta de recuerdo. En aquellos tiempos no había presupuesto para quedarse con ellas, pero al ser mi debut agradecí el detalle del míster. Era la España de 1984, con una sola televisión, la pública, sin ninguna autonómica. Al llegar a Madrid me llamaron al único programa que había, el Estudio Estadio que presentaba Matías Prats hijo. Fue una locura toda la semana posterior con entrevistas y citas con los medios, hasta que Di Stéfano, genio y figura como siempre, me dijo: “Nene, ya está bien. Vos lo que tenés que hacer es jugar al fútbol”. Sin duda, fue un partido que cambió mi vida y la de mi familia.


Por cierto, el añorado Juanito casi se lo come para festejar el segundo gol de usted a Cedrún.


Juan era especial y, además, teníamos una sintonía especial porque nuestro feeling futbolístico era muy similar. Concebíamos este juego de una forma muy parecida. Además, le agradeceré una cosa que le dijo a otros compañeros y que yo supe con el tiempo: “Oye, hay que cuidar a este chico poque es distinto y va a ser una figura del Madrid”. Siempre le recordaré.


Al acabar el partido habló usted por teléfono desde el mismo estadio con el compañero Julio César Iglesias.


Sí, él fue nuestro mentor y el que apostó y dio nombre a la Quinta del Buitre. Aquella victoria también fue suya y él estaba especialmente contento. Yo estaba flotando. Mire, si la vida me hubiese permitido hablar con Dios y se hubiese sentado a mi lado y me dice: “Emilio, ¿Cómo quieres tu debut?”. Seguro que no le habría pedido que fuera tan generoso. Me habría conformado con un pasecito de gol, un buen tiro a puerta. Vamos, que mi debut fue un cuento de Walt Disney.


¿Le dijo algo el bueno de Cedrún?


No, pero sí lo hemos hablado años después cada vez que hemos coincidido.Le diré algo, Cedrún se salió esa tarde y tuvo una actuación memorable. Pero yo estaba allí y metí dos. Suerte.


¿Por qué debutó con el número 14 a la espalda?


Porque afortunadamente en esos tiempos los dorsales titulares eran del 1 al 11 por obligación e iban sin nombre atrás. Pude elegir y pedí el 14 porque mi ídolo desde pequeñito siempre fue Johan Cruyff y era un honor debutar en el Madrid con ese dorsal porque él lo lucía en aquella maravillosa selección holandesa del Mundial de Alemania. Lo hice en su honor.

Escribió Alfredo Relaño en El País en su crónica de aquel histórico partido que con sus dos goles en Cádiz el Madrid acabó con el síndrome de Despeñaperros, porque ese año siempre perdían en Andalucía.

Sí, ese triunfo nos hizo mucho bien porque nos puso líderes en aquella época en la que el Athletic pegaba fuerte y nos ganaba Ligas.


Y, amigo mío, llegó la noche gloriosa del Anderlecht.


En Bruselas habíamos perdido por 3-0 y el Anderlecht era como el Bayern de ahora. Un equipazo con gente como Scifo, Vercauteren, Morten Olsen, Munaron.... Era una gesta pensar en remontar. Pero Camacho facilitó todo. Se pasó varios días calentándonos la cabeza. ¡Vamos a pasar, chicos, vamos a pasar! Llevaban seis meses sin perder un encuentro. Nos lo tomamos como algo personal. Tres días antes del encuentro entrenamos en secreto en el Bernabéu y Valdano se me acercó: “Nene, prepárate que vas a jugar de titular con los belgas”. Sólo pensaba en el momento de enfrentarme a ellos.


Cuénteme lo que pasó en la víspera y su experiencia cinéfila.


¡Je, je! Sí, nos llevaron a ver Karate Kid, la versión buena, la primera. Se trataba de un chico frágil que utilizando las técnicas orientales llega a ser campeón de artes marciales contra otros teóricamente más fuertes y superiores. Pues eso nos ayudó porque llegamos al campo al día siguiente convencidos de que estaba hecho. Además, no olvidaré nunca a Amancio en el vestuario. Se me acercó y me dijo: “Emilio, hoy vas a marcar tres goles”. Profético.


Mójese, el mejor gol de su vida.


Uno a Arconada en Atocha. Desde el vértice del área y por el ángulo. Otro al Estrella Roja en el Bernabéu tras apurar la línea de fondo. También los dos famosos al Cádiz. ¡Ahh!, y otro a Arconada en el Bernabéu con el campo embarrado y con la zurda desde fuera del área. No era lo mío en cualquier caso. Mi misión era más de enlace, de creación de juego. Se podría decir que fuide los primeros mediapuntas del fútbol moderno.


Pero Di Stéfano decía que a usted lo sacudían como si fuese un árbol y caían los goles a puñados.


Es cierto, pero de verdad que nunca fui un goleador. Era ofensivo y creativo y me divertía más asistir a Hugo.


Su físico era endeble.


Un jugador debe asumir sus límites y usar la inteligencia para paliar las deficiencias físicas. Es cierto que mi físico no era para presumir, pero lo mío es un claro ejemplo de que el fútbol acepta todo tipo de cuerpos y que lo importante es utilizar la inteligencia.


El peor momento de su carrera.


La eliminación de Eindhoven sin lugar a dudas. Lo nuestro por ganar la Copa de Europa era obsesivo y ese era el año para acabar con esa racha negra que se alargaba desde 1966. No lo niego. Gané cinco Ligas seguidas y muchos más títulos, pero me faltó la Copa de Europa...


Querétaro. ¡La bomba!


Yo siempre digo que un día de suerte lo tenemos todos en la vida. Pero ni siquiera jugué bien al fútbol. En serio. Sólo estuve muy afinado en el remate a gol. Mi única jugaba buena fue el penalti que provoqué a Morten Olsen. Eso sí, fue el partido que me hizo más famoso. Cosillas del fútbol.


Su debut fue memorable, pero su homenaje ante la Roma en 1995 lo fue mucho más.


Todo lo que soy se lo debo al Madrid y mi despedida fue de cuento de hadas. De los diez grandes momentos de mi vida, ese fue uno de ellos. El Bernabéu apagado, esa vuelta de despedida, esa música de fondo...


La última Copa del Rey la ganó el Madrid en Valencia, al Zaragoza (2-0), con un gol suyo y otro de Lasa.


Sí, estamos a un paso y todos en el club queremos conseguirla. Los jugadores están deseando conquistarla.


Y hábleme del gol del siglo que no fue. Ronaldo, Zidane...


Lo que hicieron Ronie y Zizou en Valladolid es el claro ejemplo de que la belleza y lo sublime no tienen necesariamente que tener una relación directa con el gol. Esa jugada la vamos a recordar siempre. Que no haya sido gol es mejor. Fue tan hermoso, tan bello, arte puro... Quedará para siempre en la memoria de todos los que nos encanta el fútbol. Al margen del equipo que seas, cuando ves el fútbol que hizo el Madrid en la segunda parte es inevitable que uno diga que eso es jugar bien al fútbol, con mayúsculas. Ver jugar a este Madrid es una verdadera delicia. Por eso el Bernabéu se llena a reventar cada partido y cada aficionado que se marcha tras un encuentro se lleva en su memoria dos o tres jugadas que le han dejado huella y justifican el precio de lo pagado. Eso provoca deleite. No creo que en la sociedad haya una actividad que te haga hoy día más feliz que ir al Bernabéu.


¿Qué le han dado a Ronaldo para que esté como un toro?


Ronie ya se ha hecho a esta ciudad, conoce bien a todos sus compañeros, se ha adaptado ya a la vida de esta capital... Su rendimiento está siendo decisivo para el equipo. Con eso está dicho todo.


¿Considera que su Madrid de la Quinta del Buitre fue inferior a este de los galácticos?


Sinceramente, por lo que significa este Madrid en el actual escenario mediático y analizando lo que transmitimos con un criterio puramente futbolístico sólo se puede equiparar al Madrid de Di Stéfano y las cinco Copas de Europa. El Madrid actual es una auténtica Selección Mundial, con Ronaldo, Zidane, Beckham, Figo, Roberto Carlos, Raúl... Y sin olvidar a Casillas, Helguera, Salgado o Guti. Tenemos los mejores jugadores del mundo, aunque mi Madrid fue ofensivamente de lo mejor que había y la gente se divirtió mucho con nosotros.


Pues ya sabe lo que podría decir el tango. Veinte años no es nada...


No me hunda. Ahora me veo pisando el Bernabéu y noto que el tiempo ya me pasó por la izquierda y por la derecha. Sólo sueño con estar aquí siempre, con el Madrid, con mi gente...



Organigrama actual

Presidente


Ramón Calderón(Soc.14.878) Abogado. Madridista por vocación desde su infancia. Socio del Real Madrid desde abril de 1979. Ya desde entonces, se convirtió en uno de los socios más activos y reconocidos por su compromiso con el club.



Vicepresidentes


Vicente Boluda(Soc. nº 47.936). Nació en Valencia el 31 de Marzo de 1955. Es abogado. Naviero. Presidente del Grupo Boluda, primera empresa naviera privada española y tercera europea en el sector del remolque de barcos.











José Ignacio Rivero(Soc. nº 45.220) Nació en Madrid el 16 de diciembre de 1948, es Ingeniero Industrial. Ha sido presidente de diferentes bancos, tanto españoles como internacionales. Actualmente es presidente de la consultora de marketing Tatum.

Amador Suárez(Soc. nº 10.319). Nació en Huelva el 12 de febrero de 1944. Es armador. Presidente del Grupo Amasua y de la Federación de Armadores de Buques de Pesca (FEABP), adscrita a la CEOE.


Vocales


José Manuel Serrano. Secretario de la Junta Directiva(Soc nº 39.193) Nacido en Madrid. Letrado de las Cortes Generales. Profesor de Derecho Administrativo. Abogado.


Luís Bárcena(Soc. nº 58.092). Nació en Madrid el 19 de septiembre de 1970.
Director General de Terra Travel.

Pascual Cervera(Soc. nº 18.775). Nació en Algeciras (Cádiz) el 26 de noviembre de 1953. Licenciado en Económicas. Master IESE. Empresario.



Luís Guerrero(Soc. nº 14.757). Nació en Madrid el 16 de mayo de 1952. Es empresario del sector fotgráfico.

Antonio Medina(Soc. nº 45.388). Nació en Jaén el 3 de diciembre de 1976, es Licenciado en Derecho y Administración y Dirección de Empresas. Abogado-Director del despacho de abogados Medina Cuadros. Vicepresidente Ejecutivo Fundación Real Madrid.


Melchor Miralles(Socio nº 4.864). Nacido en Madrid. Es periodista. Director General de Veo TV.

Francisco Moreno(Soc. nº 2.935). Nació en Guadalajara el 22 de marzo de 1941. Ejecutivo de multinacional del Automóvil. Presidente del Castilla. Patrono y Miembro de la Comisión Ejecutiva de la Fundación del Real Madrid, y ex presidente de la Asociación para la Defensa del Patrimonio del Real Madrid


Enrique Riquelme(Soc. nº. 56.775). Nació en Cox (Alicante) el 25 de octubre de 1966. Es empresario.


Antonio Serrano(Soc. nº 25.825). Nacido en Madrid el 19 de septiembre de 1948. Licenciado en Derecho. Ha pertenecido al Cuerpo Jurídico del Aíre y al Cuerpo de Letrados de la Banca Oficial. Actualmente es abogado en ejercicio.

Pedro Trapote(Soc. nº 10.304). Nació en Valladolid el 30 de diciembre de 1939 y es empresario.

Estadio Santiago Bernabeu, el fortín madridista

Nadie podía pensar en aquella oscura España del año 1943 que un hombre, Santiago Bernabéu, fuese capaz de empezar a alimentar los sueños del madridismo con la construcción de un estadio impresionante para la época. Bernabéu, que había sido designado presidente del Real Madrid ese mismo año, se dio cuenta del potencial de futuro del fútbol, y proyectó un estadio capaz para 80.000 espectadores, cuatro veces más del público que podía entrar en el viejo Chamartín.
El Real Madrid jugaba en Chamartín desde siempre, desde principios de siglo. En 1924 construyó un nuevo campo, con 20.000 espectadores de capacidad que, verdaderamente, apenas se llenaba.
Todo estaba en contra de Bernabéu. El campo se localizaba en lo que entonces eran las afueras de la ciudad y, además, el Madrid no tenía dinero ni el país cemento. Todas las dificultades se fueron allanando. Pedro Muguruza, entonces director del proyecto del Valle de los Caidos y presidente del jurado del proyecto de Chamartín, ganado por Alemany Soler y Muñoz Monasterio, se ocupó de que no faltase el material en la obra. Y Bernabéu de que hubiera dinero para construirla.
El club patrocinó una emisión de 60.000 obligaciones en tres años, al veinte por ciento de interés, amortizables en veinte años y con la garantía de los terrenos. Al final el estadio costó una impresionante cantidad de dinero para una época en la que se comía en un buen restaurante por cinco pesetas: 38 millones.
El estadio se inauguró el 14 de diciembre de 1947 con un partido contra el Os Belenenses portugués, aunque lo mejor estaba por llegar. Y lo mejor fue la llegada de Alfredo di Stéfano, en 1954.Di Stéfano, que llamaba al estadio ‘la fábrica’ encabezó un fabuloso equipo capaz de ganar cinco Copas de Europa seguidas e innumerables ligas.
Fue la época dorada del Real Madrid que se asentó como club y encabezó el fútbol mundial, como recientemente ha reconocido la FIFAal nombrarle el mejor club de la historia. El resto es contemporáneo. Ligas, Copas de España, dos copas de la UEFA, hasta nueve Copas de Europa...

El viejo Chamartín. Años 20: La prehistoria blanca

El viejo Chamartín fue el escenario de los primeros tiempos del Real Madrid. La imagen es de 1914, doce años después de la fundación del club. Muy lejos quedaba todavía incluso el primer Chamartín, que desapareció en los primeros 40.






La primera fachada de la Castellana. Años 40: La fábrica de los sueños



La Castellana eran los altos del Hipódromo, casi las afueras. Esta es la primera fachada del gran Chamartín, inaugurado en 1947. La fachada de la fábrica de los sueños de fútbol.









Primera obra. Años 80: El Mundial

El estadio duró casi 40 años como fue creado. Pero en los 80 se remodeló para acoger los partidos del Mundial de 1982, con la esperanza de que estuviera España. Nos tuvimos que conformar con ver un magnífico Bernabéu.



Las torres. Los 90: un estadio de hoy

Pasó tiempo entre la primera remodelación y la segunda:catorce años. Los tiempos adelantaban y había que dar comodidad. Surgieron las torres de acceso y se levantaron nuevas tribunas, para terminar con las localidades de pie.

Palmares

31 Ligas
1931-32 1932-33 1953-54 1954-55 1956-57 1957-58 1960-61 1961-62 1962-63 1963-64 1964-65 1966-67 1967-68 1968-69 1971-72 1974-75 1975-76 1977-78 1978-79 1979-80 1985-86 1986-87 1987-88 1988-89 1989-90 1994-95 1996-97 2000-01 2002-03 2006-07 2007-08




17 Copas del Rey
1904-05 1905-06 1906-07 1907-08 1916-17 1933-34 1935-36 1945-46 1946-47 1961-62 1969-70 1973-74 1974-75 1979-80 1981-82 1988-89 1992-93





9 Copas de Europa
1955-56 1956-57 1957-58 1958-59 1959-60 1965-66 1997-98 1999-00 2001-02. El Real Madrid es el único club que posee la Copa de Europa en propiedad por haberla conseguido cinco veces consecutivas.







1 Supercopa de Europa
2002







2 Copas de la UEFA
1984-85 1985-86






1 Copa de la Liga
1984-85







8 Supercopas de España
1988 1989 1990 1993 1997 2001 2003 2008





3 Copas Intercontinentales
1960 1998 2002






2 Copas Latinas
1955 1957







2 Pequeñas Copas del Mundo
1952 1956